¿Qué es la eficiencia energética?
La eficiencia energética consiste en reducir la cantidad de energía utilizada para determinadas tareas manteniendo la productividad y el rendimiento. Para mejorar esto, las empresas pueden adoptar ciertas prácticas y tecnologías que reduzcan el consumo de energía en los distintos procesos manteniendo los mismos resultados.
Mejorar la eficiencia energética también puede significar cambiar comportamientos y hábitos dentro de la empresa. Esto podría implicar cambiar a sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado que consuman menos energía, cambiar la forma en que las personas manejan las máquinas y crear una cultura general que gire en torno a prácticas de eficiencia energética.
Importancia
La implantación de la eficiencia energética ofrece beneficios económicos, sociales y medioambientales a una organización. Para empezar, centrarse en la eficiencia energética abarata los costes de funcionamiento de una empresa. Esto se debe a que gastará menos en energía, lo que puede modificar sus márgenes de beneficio y aumentar los ingresos.
Además, los mercados modernos fomentan las prácticas respetuosas con el medio ambiente. Si las organizaciones demuestran que dan prioridad a la eficiencia energética, esto se refleja bien en la reputación general. Esto es especialmente cierto cuando se trata de llegar a mercados masivos con sus productos o servicios.
Por último, las prácticas de eficiencia energética reducen la huella de carbono de una empresa. Muchos países recurren a métodos insostenibles para producir energía. Por tanto, cuanta menos energía utilicen las organizaciones en sus operaciones, menor será su impacto en el medio ambiente. Por eso la eficiencia energética es muy importante para las empresas modernas.
Prácticas y tecnologías energéticamente eficientes
Hay muchas formas de aumentar la eficiencia energética en su empresa. Los distintos sectores requieren herramientas diferentes, por lo que cada empresa tiene un enfoque único de la eficiencia energética. Pero para que tenga por dónde empezar, aquí tiene algunas prácticas y tecnologías básicas de eficiencia energética que puede adoptar en su organización.
Cambiar las bombillas
Esto puede parecer muy sencillo, pero puede suponer un gran avance en términos de eficiencia energética. Cambiar a bombillas LED en su organización puede reducir drásticamente su consumo de energía. Además, las bombillas LED modernas son muy brillantes y están disponibles en muchos colores diferentes, por lo que es fácil elegir la que mejor se adapte al espacio de trabajo.
Modificación de los sistemas HVAC
Al igual que ocurre con las bombillas, los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado se han vuelto mucho más eficientes en los últimos años. Calentar y refrigerar el lugar de trabajo puede resultar muy caro para las empresas. Pero si actualiza su sistema de calefacción, ventilación y aire acondicionado, le resultará mucho más fácil controlar el clima del lugar de trabajo y consumirá menos energía.
Digitalice su forma de trabajar
Remodelar el espacio de trabajo en torno a la eficiencia energética
Otra forma de mejorar la eficiencia energética es remodelar el lugar de trabajo. Por ejemplo, puedes añadir más ventanas o cambiar de sitio las cosas para que entre más luz natural, reduciendo así la cantidad de luz artificial necesaria. También puedes aislar mejor las paredes para reducir la necesidad de refrigeración y calefacción.
Hay muchas formas de remodelar su espacio para aumentar la eficiencia energética, lo que le ofrece infinitas opciones.
Fuentes de energía sostenibles
Un cambio importante que pueden hacer las empresas para aumentar la eficiencia energética es cambiar su fuente de energía. La energía sostenible ha crecido mucho en los últimos años y, hoy en día, las organizaciones pueden comprar paneles solares y tecnología similar para alimentar ciertos aspectos de su negocio. De ese modo, dependes menos de los combustibles fósiles y otras fuentes de energía insostenibles.
Normas y directivas sobre eficiencia energética
Existen varias normas de eficiencia para ayudar a las organizaciones a reducir su consumo de energía. He aquí algunas de las más destacadas que se aplican en distintos lugares:
Departamento de Energía de Estados Unidos (DOE)
El DOE dispone de numerosas normas para distintos aparatos. Así se garantiza que los aparatos y equipos sean eficientes desde el punto de vista energético antes de salir al mercado. Entre los que se han sometido a pruebas con arreglo a estas normas figuran la fontanería, la iluminación y los aparatos industriales.
Comisión Europea
La Comisión Europea ha establecido una directiva sobre eficiencia energética en un esfuerzo por convertirse en un continente neutro en carbono para 2050. La directiva incluye diversos esfuerzos para reducir los índices de consumo en todo el continente, lo que se aplica a muchas organizaciones.
Retos de la aplicación de la eficiencia energética
El mayor obstáculo a la implantación de la eficiencia energética en las organizaciones y los hogares es el financiero. Aunque cambiar a electrodomésticos y prácticas energéticamente eficientes puede ahorrar dinero con el tiempo, tienen un coste inicial elevado. Este coste inicial es demasiado elevado para algunas empresas, lo que las retrasa a la hora de aplicar prácticas de eficiencia energética.
Además, gestionar y mantener la cultura de eficiencia energética de una empresa supone un gran esfuerzo. Se necesita todo un equipo para implantar la eficiencia energética, y muchas organizaciones no disponen de la mano de obra ni de los recursos necesarios.
Dicho esto, la eficiencia sigue siendo una cuestión clave para lograr la sostenibilidad en el futuro.
Preguntas frecuentes sobre eficiencia energética
Algunos ejemplos de eficiencia energética son la adopción de bombillas LED de bajo consumo, la remodelación del lugar de trabajo para que entre más luz natural y el cambio a electrodomésticos y herramientas modernos y de bajo consumo.
Actualmente, la eólica está clasificada como la fuente de energía más segura y limpia. Dicho esto, el paso a la energía eólica requiere una gran inversión, por lo que puede pasar algún tiempo antes de que empecemos a adoptar esta tecnología.
Aunque no es obligatoria, la eficiencia energética puede ofrecer diversas ventajas a una organización. Además, hay algunas zonas con objetivos específicos en materia de eficiencia energética que las empresas tienen que trabajar para cumplir o, de lo contrario, enfrentarse a las consecuencias.
Para practicar la eficiencia energética, es necesario que toda la organización se ponga manos a la obra. A veces, esto requiere un cambio importante en la cultura y las prácticas. Sin embargo, a largo plazo, esto redundará en una mayor productividad y sostenibilidad.