¿Qué es un Programa de Formación?
Un programa de formación es una iniciativa estructurada que mejora las habilidades, conocimientos y capacidades de los empleados. Dota a la mano de obra de las competencias necesarias para sobresalir en sus funciones y adaptarse a los cambios de la industria. Invertir en programas de formación y garantizar una planificación e impartición adecuadas cultiva una mano de obra más competente y adaptable, que contribuye al éxito de la organización.
Significado
Llevar a cabo orientaciones en el lugar de trabajo o cursos de perfeccionamiento basados en módulos de instrucción genéricos es fácil. Existen numerosos sistemas de gestión del aprendizaje que pueden ayudar en este sentido. Crear e implantar programas de formación desde cero es más difícil, sobre todo cuando las organizaciones quieren abordar las necesidades específicas de aprendizaje de sus trabajadores. Pero esto es increíblemente importante, ya que conllevaría numerosos beneficios, principalmente los siguientes:
- Mejora el rendimiento general – Un programa de formación bien definido cubre las lagunas de aptitudes y aborda los conocimientos obsoletos. La mejora de habilidades y conocimientos específicos conduce a un mejor rendimiento laboral.
- Mejor retención y adaptabilidad – El compromiso de los empleados está garantizado cuando a los trabajadores les gusta lo que están aprendiendo. Y como los trabajadores adquieren las herramientas para resolver problemas y adaptarse a los cambios mediante una formación específica, la empresa también garantiza el cumplimiento de las normas y reglamentos del sector.
- Aumenta la satisfacción de los empleados – Los empleados aprecian la inversión en su desarrollo profesional. Esto eleva su moral, haciéndoles sentir que son miembros vitales de la organización. Las empresas que invierten en sus trabajadores no tienen que preocuparse por los altos índices de rotación.
Alcanzar la excelencia operativa
El proceso de 6 pasos de un programa de formación eficaz
Un enfoque único de la formación no da los mejores resultados. Con el compromiso sincero de los máximos dirigentes, una buena cantidad de tiempo y los recursos adecuados, los profesionales de Recursos Humanos (RRHH), los directores de programa y los supervisores de departamento pueden seguir eficazmente estos seis pasos a la hora de gestionar una campaña de formación:
Evaluar las necesidades reales
El primer paso de este complejo proceso es identificar las necesidades de los trabajadores y de la organización en su conjunto. Las empresas deben adaptar el programa para abordar estas carencias de competencias y los retos del sector. Realizar un análisis de necesidades mejora la toma de decisiones, establece prioridades y, en última instancia, mejora los flujos de trabajo necesarios para planificar e impartir cursos.
Establece objetivos precisos
Los responsables de formación deben definir metas y objetivos de aprendizaje claros. Al descuidar este paso, los profesionales pueden distraerse con demasiados temas no relacionados o no esenciales. Por otro lado, pueden crear una hoja de ruta clara y predecir los posibles resultados cuando se definen los objetivos.
Desarrolla cuidadosamente el contenido
Un contenido de formación eficaz combina información relevante y compromiso. Hay muchas formas de conseguirlo, pero aquí tienes algunos consejos que pueden ayudarte:
- Desglosa los conceptos complejos para que sean más digeribles mentalmente.
- Garantiza la claridad utilizando un lenguaje sencillo y coherente, y evita la jerga o los términos técnicos que los trabajadores no conozcan.
- Incorpora ejercicios prácticos y estudios de casos para fomentar el aprendizaje práctico.
- Fomenta la interacción de los participantes mediante debates, sesiones de preguntas y respuestas o foros.
Teniendo esto en cuenta, el programa se convierte en una poderosa herramienta para la retención de conocimientos y el desarrollo de habilidades.
Elige la mejor entrega
Determinar el mejor método para transmitir el contenido es crucial para el éxito. Considera la naturaleza de la materia, las preferencias de los trabajadores y los recursos permitidos. Aquí tienes algunos ejemplos que puedes utilizar:
- Talleres presenciales
- Seminarios web en directo o pregrabados
- Cursos en línea del tamaño de un bocado
- Diversos multimedia con módulos interactivos
- Aprendizaje combinado
Los directivos pueden determinar las preferencias enviando cuestionarios a los empleados. Los responsables de formación y desarrollo también deben incluir las posibles limitaciones de tiempo y los objetivos deseados en las encuestas previas a la formación.
Evaluar ampliamente la retención
La evaluación posterior a la formación es increíblemente vital para valorar la eficacia de la campaña. Proporciona información valiosa sobre lo que aprendieron los trabajadores, cómo utilizaron sus conocimientos en el trabajo y la experiencia de los responsables y coordinadores de la formación. Aquí tienes algunos métodos que puedes utilizar:
- Método de la Taxonomía Kirkpatrick (Reacción – Aprendizaje – Comportamiento – Resultados)
- Modelo ROI (Retorno de la Inversión) de Philips
- Modelo CIRO (Comparación de objetivos programáticos y organizativos)
Utilizar una combinación de estos métodos y recopilar datos de numerosas fuentes dará mejores resultados, ayudando a la empresa a trabajar en el siguiente paso.
Haz los ajustes necesarios
La etapa final del proceso consiste en afinar el programa basándose en los resultados de las evaluaciones. Implica revisar el contenido, los métodos de entrega y los objetivos basándose en las opiniones recibidas o en la evaluación realizada. También existe la posibilidad de que las necesidades de la organización hayan cambiado en función de la evolución del sector.
Sea cual sea el motivo, esta fase del programa de formación de los empleados garantiza la mejora continua y la adaptabilidad, manteniendo la competitividad de la empresa y de sus trabajadores.
Aprovechar la tecnología para el éxito
La tecnología desempeña un papel crucial en la modernización y mejora de la creación y aplicación del aprendizaje y desarrollo en el lugar de trabajo. He aquí tres ejemplos notables que las organizaciones deberían utilizar para facilitar una formación eficaz:
- Sistema de Gestión de la Formación – Esta solución informática agiliza muchas tareas administrativas relacionadas, como la asignación de recursos, la creación de cursos, la documentación, el seguimiento del progreso en tiempo real y la evaluación.
Transforma los enfoques de formación tradicionales y garantiza el éxito de todo el equipo utilizando la función de Formación de SafetyCulture. Esta plataforma móvil, altamente versátil y escalable, proporciona un eje centralizado para todos los materiales de formación, facilitando su organización y actualización. Los usuarios también pueden seguir y analizar el progreso individual y de grupo en tiempo real, lo que facilita una evaluación más eficaz. - Plataformas de e-learning o LMS – Los sistemas de gestión del aprendizaje se centran en ofrecer contenidos educativos en línea. Estas plataformas digitales suelen añadir elementos multimedia y evaluaciones interactivas (por ejemplo, cuestionarios y pruebas) que imparten conocimientos y atraen a los usuarios. Lo mejor de todo es que permiten a cada persona avanzar en un tema a su propio ritmo.
- Realidad Virtual y Realidad Aumentada – Esta tecnología sumerge a los usuarios en entornos realistas, permitiendo experiencias prácticas sin los peligros habituales en las demostraciones reales. Las organizaciones que operan en sectores de alto riesgo, como la extinción de incendios, la aviación y la minería, utilizan a menudo la RA y la RV.