Funciones de un almacén

Descubra las principales funciones de un almacén y cómo aumentar su funcionalidad.

¿Cuáles son las funciones de un almacén?

El almacenamiento es una parte crucial de la cadena de suministro. Y para gestionar eficazmente un almacén, es importante entender sus funciones. En el pasado, los almacenes se utilizaban exclusivamente para guardar mercancías. Sin embargo, los almacenes modernos tienen una función mucho más amplia. Además de almacenar las mercancías, los almacenes se encargan de facilitar el movimiento, la estabilización de los precios, etc.

Los almacenes modernos son la sede de muchas operaciones cruciales. Es el lugar donde llegan o se distribuyen las mercancías, por lo que es importante que las organizaciones presten mucha atención a su sistema de gestión de almacenes.

Por lo tanto, aquí están las otras principales funciones de un almacén que son muy importantes de entender si desea optimizar la funcionalidad del almacén:

Almacenamiento de mercancías

La función original del almacén era puramente de almacenamiento. Y aunque los almacenes modernos sirven para muchos más propósitos, el almacenamiento de mercancías sigue siendo una función primordial. Aquí es donde las organizaciones pueden almacenar sus bienes y equipos, inventarios y otros artículos.

Los diferentes almacenes almacenan diferentes mercancías. Puede haber algunos almacenes con elementos de control de la temperatura que son importantes para almacenar productos sensibles a la temperatura. De este modo, sólo se caducarán y desperdiciarán menos productos.

Existen dos enfoques principales para el almacenamiento de mercancías en un almacén. El enfoque principal es almacenamiento planificadoEn este caso, la empresa calcula cuidadosamente la demanda de los clientes y almacena una cantidad suficiente de productos para satisfacerla.

Además, también hay almacenamiento ampliado. Se trata de productos cuya demanda puede aumentar o disminuir en función de varios factores. Esto permite a las empresas estimar mejor sus existencias para satisfacer la demanda de los clientes.

Aseguramiento de las mercancías

Como ya se ha dicho, los almacenes evitan que las mercancías se estropeen y caduquen. Cuando ciertos productos están expuestos al calor, al viento y a otros factores ambientales, pueden perder frescura. Esto le cuesta mucho a una organización, ya que estos bienes tienen que ser desechados.

Pero además de evitar que las mercancías se estropeen, los almacenes las protegen de los robos. Los almacenes son instalaciones seguras en las que las organizaciones pueden almacenar mercancías de forma segura. Y como la mercancía se guarda en un solo lugar, hay menos posibilidades de perderla, lo que puede ocurrir si se está constantemente en la carretera.

Los almacenes modernos están cuidadosamente diseñados en función de los productos que almacenan. Si hay productos que requieren seguridad adicional, temperaturas específicas y otras instrucciones específicas de almacenamiento, un buen almacén debe construirse en torno a estas necesidades.

Facilitar el movimiento

El almacén es el principal centro de recepción  y el envío de mercancías. Muchas organizaciones utilizan el almacén como punto de descarga y envío de productos. Es importante que el movimiento de los productos sea fluido para que las organizaciones puedan cumplir los plazos y satisfacer constantemente la demanda de los clientes.

Cuando todo se descarga y se envía desde el mismo lugar, todo el proceso es mucho más sencillo para todos los implicados. Tanto si fabrica los productos usted mismo como si los adquiere de diferentes fuentes, el hecho de que se entreguen y envíen desde un almacén ofrece un proceso mucho más ágil.

Esto es especialmente importante cuando se manipulan productos sensibles al tiempo que pueden caducar si se almacenan demasiado tiempo.

Estabilización de los precios

Mantener los productos en un almacén permite ajustar la oferta a la demanda de los clientes. Esto puede evitar los picos o caídas de precios esporádicos y bruscos que pueden hacer mucho daño a un negocio.

Por ejemplo, cuando hay poca demanda en el mercado, puede utilizar el almacén para guardar la mercancía de forma segura. Así, la mercancía se mantendrá fresca y utilizable mientras la demanda sea baja. Y cuando la demanda aumente, podrá enviar la mercancía almacenada en buenas condiciones.

Cuando hay demasiada oferta para la demanda actual, los precios pueden bajar. Cuando esto sucede, los fabricantes y las organizaciones pueden recibir un gran golpe. Así, almacenando los productos, puede evitar que los precios bajen bruscamente.

Esta es una de las funciones más abstractas e invisibles de un almacén. Sin embargo, puede aportar muchos beneficios a una organización.

Procesamiento adicional

El almacén también sirve para realizar servicios de valor añadido a los productos. Esto puede aumentar su valor y, en consecuencia, los ingresos de la empresa.
Por ejemplo, los empleados pueden personalizar, reenvasar o cambiar la marca de determinados productos. De este modo, podrá satisfacer las demandas de determinados minoristas que aumentan la satisfacción y, al mismo tiempo, los ingresos generales.

Otros servicios de valor añadido que puede realizar en el almacén son el envasado de regalos, el etiquetado, el control de calidad y la agrupación.

Documentación

El almacén también sirve de centro de información. Aquí puede encontrar la documentación de las mercancías enviadas, de las que están en stock y de las futuras entregas que puedan producirse en el futuro.

Esto permite a los responsables de los almacenes hacer un seguimiento completo de las operaciones y los procesos a lo largo de la cadena de suministro. De este modo, las operaciones están más organizadas, aumentando la eficiencia y la productividad.

Los empleados pueden realizar inspecciones, crear informes y almacenar información sobre todas las operaciones a partir de los datos de su almacén. Aunque la mayoría de las organizaciones digitalizan esta información, el almacén sigue siendo la fuente de toda la información.

Cuando los almacenes se utilizan de forma adecuada, puede consultar los documentos del almacén para aprender mucho sobre el funcionamiento de su empresa sobre el terreno. Esto incluye cuándo se enviaron ciertos productos, diferentes clientes y consumidores, y cuándo las ventas fueron altas o bajas.