Guía completa de fuentes de energía

Conozca los distintos tipos de fuentes de energía, sus características y su huella medioambiental.

¿Qué son las fuentes de energía?

Las fuentes de energía son los distintos medios que permiten generar energía. El proceso empieza por captar energía de fuentes renovables y no renovables y convertirla en formas secundarias como electricidad y combustible. Luego, se transmiten por diversos canales (por ejemplo, las líneas eléctricas) para alimentar las actividades industriales y cotidianas.

Tipos

Las fuentes de energía pueden clasificarse en dos categorías: renovables y no renovables. En esta sección se analizarán en detalle estos tipos de fuentes de energía.

Energía no renovable

La energía no renovable, también conocida como energía convencional, se refiere a fuentes finitas de energía, como el petróleo, el gas natural y el carbón. Debido a su asequibilidad y escalabilidad en términos de producción, ha ocupado una parte importante de la reserva mundial de energía durante cientos de años. En 2019, constituía más del 85% del suministro mundial de energía.

Sin embargo, sus suministros pueden agotarse fácilmente, dados los limitados recursos que pueden extraerse de lugares concretos y el tiempo que se tarda en reponerlos. Además, plantea importantes riesgos medioambientales debido a sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y a la contaminación resultante de sus partículas residuales y subproductos.

Energía renovable

Las energías renovables aprovechan la energía de recursos naturales que se renuevan constantemente, como la luz solar, el viento y el agua. Dado que funciona en abundancia y libera menos gases nocivos a la atmósfera, este tipo de fuente de energía ofrece una alternativa más limpia y sostenible que las fuentes de energía tradicionales.

En la actualidad, muchas empresas están realizando la transición a fuentes de energía limpias como parte de sus esfuerzos por reducir su huella de carbono y diversificar su suministro energético. Sin embargo, los inconvenientes de este tipo residen en el carácter intermitente de sus fuentes y en los costes iniciales asociados.

Ejemplos de fuentes de energía

Después de hablar de los tipos de fuentes de energía, es hora de profundizar en las fuentes específicas que entran dentro de cada categoría. A continuación se enumeran los ejemplos más comunes de fuentes de energía:

Combustibles fósiles

Los combustibles fósiles son fuentes de energía no renovables que se han formado a partir de los restos de animales y plantas prehistóricos. Estas reservas enterradas ricas en carbono se extraen mediante diversos métodos (por ejemplo, perforación, fracturación hidráulica) para crear energía para calefacción y otros fines.

Algunos ejemplos de combustibles fósiles son los siguientes:

  • Carbón: sustancia negra similar a la roca que se utiliza para producir calor, electricidad y acero.
  • Gas natural: gas incoloro e inodoro compuesto principalmente de metano.
  • Petróleo: mezcla de hidrocarburos que se refina para obtener gasolina, gasóleo y otros combustibles.

Los combustibles fósiles son la principal fuente de energía del mundo, y en 2021 suministrarán cuatro quintas partes de la combinación energética mundial. Y aunque son fáciles de conseguir y más baratos de producir, también funcionan con cantidades limitadas, tardan mucho en reponerse y contribuyen significativamente a las emisiones mundiales de carbono.

Energía nuclear

La energía nuclear es una fuente de energía con cero emisiones producida a partir de la fisión nuclear, el proceso de división de los átomos de uranio para generar energía. Libera enormes cantidades de energía con cantidades relativamente pequeñas de combustible y cero emisiones de gases de efecto invernadero, lo que la convierte en un recurso limpio y muy eficiente. Sin embargo, esta fuente de energía requiere grandes precauciones de seguridad, como la correcta manipulación y eliminación de los residuos radiactivos, para evitar la contaminación y los accidentes.

Energía solar

La energía solar es una fuente de energía renovable que utiliza paneles solares para generar electricidad. Estos paneles, que suelen instalarse en tejados y grandes campos, absorben la energía de los rayos solares y la convierten en electricidad. La energía solar ha sido una opción cada vez más popular de energía limpia por ser una de las fuentes más rentables y versátiles, pero su rendimiento está sujeto a las condiciones meteorológicas.

Energía eólica

La energía eólica es una fuente de energía alternativa que aprovecha la fuerza del viento mediante aerogeneradores. Como la energía eólica depende en gran medida de las condiciones meteorológicas, los aerogeneradores suelen colocarse en zonas con vientos de gran velocidad, como llanuras abiertas y regiones costeras. Sin embargo, pueden afectar negativamente a la fauna circundante y generar demasiado ruido si no se mantienen correctamente.

Energía geotérmica

La energía geotérmica es otra fuente de energía limpia que aprovecha el calor natural de la Tierra para producir electricidad. Utiliza centrales geotérmicas o bombas de calor para acceder al agua caliente y al vapor para generar energía. Aunque no depende de condiciones meteorológicas intermitentes para funcionar, su producción se limita a zonas con altos niveles de actividad geotérmica.

Energía hidroeléctrica

La energía hidroeléctrica utiliza el agua en movimiento de los embalses para generar electricidad. En 2021, esta fuente de energía renovable ha representado más del 6% del suministro energético mundial.

La energía hidroeléctrica es una de las fuentes de energía limpia más fiables, dada la longevidad de las centrales hidroeléctricas. Pero, por otro lado, la construcción de estas presas puede tener efectos medioambientales adversos, como la destrucción de hábitats y problemas locales de abastecimiento de agua.

Energía de la biomasa

La energía de la biomasa es un recurso renovable derivado de la madera, los cultivos, los residuos y otros materiales orgánicos. Esto puede convertirse en electricidad para las actividades cotidianas o en biocombustibles para los vehículos.

Al utilizar organismos existentes, la biomasa es una alternativa más viable que los combustibles fósiles. Sin embargo, los materiales de esta fuente deben reponerse de forma sostenible para no dañar el medio ambiente.

Impacto medioambiental

Las fuentes de energía tienen distintos niveles de impacto sobre el medio ambiente, incluidas estas 4 áreas clave:

  • Cambio climático – La producción de energía es uno de los principales motores del cambio climático, ya que es responsable de tres cuartas partes de las emisiones totales de carbono del mundo. Una parte sustancial puede atribuirse a las actividades con combustibles fósiles, que liberan grandes cantidades de GEI a la atmósfera.
  • Contaminación atmosférica – Los combustibles fósiles, la biomasa y la energía nuclear producen partículas nocivas que pueden contaminar el aire y poner en peligro la salud humana. La exposición a estos contaminantes puede exponer a las personas al riesgo de padecer problemas respiratorios, cardíacos e incluso cáncer.
  • Contaminación del agua – La extracción inadecuada de combustibles fósiles y la mala manipulación de los nucleares también pueden contaminar las masas de agua. Por ejemplo, los vertidos de petróleo y las reacciones nucleares incontroladas pueden contaminar las fuentes de agua y, a su vez, dañar el ecosistema marino.
  • Destrucción ecológica – Determinadas fuentes requieren infraestructuras que pueden alterar el ecosistema del lugar donde se construyen. La construcción de embalses para energía hidroeléctrica, por ejemplo, puede provocar la pérdida de hábitats para la flora y la fauna locales.

Preguntas frecuentes sobre fuentes de energía

Los combustibles fósiles se consideran las fuentes de energía más comunes, ya que constituyen una parte sustancial del suministro energético mundial. Durante siglos, han sido las fuentes de energía dominantes, pero presentan varios inconvenientes, como su disponibilidad finita y su impacto medioambiental.

Las fuentes de energía más sostenibles son las renovables, como la solar y la eólica. Se reponen de forma natural y no emiten gases de efecto invernadero ni contaminantes durante su funcionamiento, lo que las convierte en alternativas más limpias a los combustibles fósiles. En los últimos años, están ganando terreno en el mercado de la energía a medida que el mundo pasa de las fuentes de energía tradicionales a otras más ecológicas.

La transición a fuentes de energía más ecológicas conlleva sus propios retos, como los siguientes:

  • Intermitencia de las fuentes de energía (especialmente eólica y solar)
  • Costes iniciales asociados a la construcción y mantenimiento de infraestructuras
  • Necesidad de soluciones de almacenamiento de energía para un suministro constante de electricidad
  • Escalabilidad de los sistemas de energías renovables para satisfacer sistemáticamente la demanda energética